• Los malos hábitos y el estrés hacen que dormir se convierta en un auténtico calvario
  • Seguir una rutina a la hora de acostarnos o evitar las pantallas en la cama pueden ayudarnos a ganar la batalla contra el insomnio

 

Descansar bien es clave para poder afrontar el día con ánimo y seguridad. A su vez, es determinante para tener una buena salud y la cabeza fresca y despejada. No obstante, los malos hábitos y el estrés que se padecen a diario hacen que dormir se convierta en ocasiones en un calvario contra el que muchos se dan de bruces. Por ello, le ofrecemos siete consejos básicos que le ayudaran a conseguir un descanso placentero.

1-Procure acostarse y levantarse siempre a la misma hora. ¿Quién no se ha quedado en la cama el domingo hasta las 12 del mediodía y, posteriormente, no ha podido dormir por la noche? Los expertos aconsejan acostarse y despertarse a la misma hora o, como mucho, no variar demasiado los horarios, pues de esta forma se consigue que el «reloj biológico» no sufra y no le haga estar despierto a altas horas de la noche cuando, en la jornada siguiente, tiene que trabajar.

2-No luche contra el sueño. Si no puede dormir, no lo va a conseguir pensando en que tiene que acostarse, pues eso solo le generará ansiedad. Lo mismo sucede cuando tiene mucho sueño y, como está pasándolo bien, no quiere meterse en la cama.

 

3-Controle la temperatura de su dormitorio. Es una de las pautas más difíciles durante el verano, pero es necesario mantener su habitación entre los 16 y los 18 grados para favorecer el descanso. Y es que, un cuerpo fresco favorece la liberación de la hormona del sueño (melatonina). Por otro lado, el cuarto debe estar también ordenado, pues esta es una característica que relaja la mente del ser humano.

4-La postura corporal. Deberíamos pasar un tercio de nuestra vida durmiendo (8 horas de 24). Por ello, es importante tener en cuenta qué postura corporal adquirimos a la hora de acostarnos y saber si puede causarnos daño durante el sueño. Si duerme de lado, por ejemplo, un truco es poner la almohada entre las piernas para minimizar la torsión de la espalda.

5-Comer alimentos que favorezcan el sueño. Si no puede dormir, puede ingerir alimentos que promuevan la liberación de melatonina. Entre ellos destacan la leche, las almendras, la manzanilla, la avena o los plátanos. Con todo, tenga cuidado, pues aunque no hay que irse a la cama con hambre, cenar justo antes de acostarte no favorece el sueño.

6-Huya de las pantallas. Puede parecer una obviedad pero, a día de hoy, son muchos los que se van a la cama con el teléfono móvil cerca de su cara. Sin embargo, el brillo del móvil desconcierta al cerebro y le hace pensar que es de día, lo que dificulta el sueño.

7-Siga la regla de los 15 minutos. Si a los 15 minutos no ha logrado dormir, lo mejor es que deje de intentarlo, salga de la cama y haga algo que estimule el sueño como leer un libro. Cuánto más vueltas dé en la cama, más frustrado se sentirá.

Y sobretodo, recuerde que el mejor descanso sólo lo conseguirá en los mejores colchones.