¿Qué estamos haciendo cuando compramos un colchón nuevo?

Una respuesta es que estamos invirtiendo en salud, otra es que estamos cambiando la pieza más importante de la casa, una más es que en el colchón es donde se producen los encuentros más íntimos y serios de todo el mundo, encima del colchón es dónde nos regeneramos del día que acabamos de pasar para volver a estar nuevos el día siguiente, por todo esto y mucho más hay que reflexionar antes de decidir por un colchón que nos acompañara 10 años y por lo tanto no puede ser uno cualquiera.

Imagínense que compran uno para los próximos 10 años y se equivocan, en primer lugar pensaran que les han engañado y después que ha tirado el dinero, pues alto! no hace falta llegar a este extremo.

La norma o consejo principal es, no buscar entre las ofertas. ¿A caso cuando va al médico busca el peor? O ¿si necesita un abogado se interesa por el mas barato, que seguramente le hará perder el caso? ¿Si necesita un arquitecto contratará a uno que no tiene ni idea?

¿Que tenemos que hacer para que se cumplan nuestras expectativas?

Hay que escuchar a quién sabe de este tema tan importante para nuestro bienestar, informarse es lo primero, informarse no quiere decir buscar gangas, los buenos colchones no se encuentran entre las gangas ni en los outlets, ni en los mercados, ni en teletiendas o ventas directas.

El mejor de los puntos de información es sin duda una tienda especializada en descanso, no una tienda que también tienen colchones, sino una que solo tengan colchones, hay que entrar o ponerse en contacto con ellos y hacer las preguntas que les interesen o les preocupen, si se tratara de cambiar el colchón viejo por uno nuevo no haría falta tanto protocolo, pero si realmente quieren notar la diferencia entre estar tumbado con molestias o tener un descanso placentero y recuperador, hay que tomárselo en serio.

  • Actuando de esta forma estarán satisfechos de invertir en un colchón de calidad y que cumpla todas sus exigencias ya que solo les aportará beneficios.