Carpe noctem, aprovechar la noche, un sábado por la mañana abrimos la ventana y esta lloviendo, hay que cambiar planes, no podemos ir de paseo ni tampoco practicar ningún deporte, es ahí donde uno se da cuenta de que vale la pena invertir en una cama cómoda y si es posible y muy espaciosa para que no tengamos necesidad de levantarnos por molestias del colchón en nuestra espalda cansada o bien por nuestra postura en el trabajo o por los esfuerzos físicos del mismo, la espalda seguramente es la parte del cuerpo mas castigada y como a veces es difícil cuidarla de día, podemos compensarlo cuidándola por la noche con un buen colchón de muelles ensacados.